Hemos visto a lo largo de estos meses diversas formas de captar la atención de los contratantes para conseguir un empleo, pero ¿qué ocurre cuando hemos conseguido superar la barrera y nos conceden por fin una entrevista de trabajo?
Es el último peldaño que nos queda y también el más difícil, puesto que tienes que demostrar en persona, y argumentando, que realmente vales para ese empleo que estás solicitando.
Pocas veces en mi vida he tenido esta ocasión, sin embargo ahora intentaría afrontar la entrevista de forma diferente a como lo hice (sobre todo si se trata de una entrevista para un trabajo de publicidad).
En primer lugar mostrar mucha más seguridad, puesto que estaba bastante nerviosa e iba prácticamente con la cabeza gacha. Hay que ser capaz de decir, no solamente con las palabras sino con los gestos y la postura, “Aquí estoy yo. Y soy perfectamente capaz de hacer este trabajo”. Y en segundo, prepararse antes de la entrevista, intentando averiguar a qué se dedica la empresa y cómo son sus trabajadores, y en especial el director.
En una de las entrevistas que tuve, me hicieron unas pruebas de mecanografía y me tuvieron allí dos horas. No me hicieron demasiadas preguntas, puesto que en este caso era para un puesto de recepcionista o auxiliar administrativa en una inmobiliaria. En este caso iba mucho más confiada y se notó (conseguí el empleo).
La ropa, por supuesto, tiene también mucho que ver en las entrevistas. Según la indumentaria que utilicemos estaremos comunicando una cosa u otra. En aquella ocasión iba arreglada pero sin maquillar. En este sentido, creo que es importante ir sin maquillar (o que si vamos maquilladas no se note demasiado), puesto que, desde mi punto de vista, estamos comunicando que llevamos una máscara y que en realidad somos de manera muy diferente a la que el entrevistador está viendo en ese momento (y ya puestos, también podríamos estar sugiriendo, si nos pasamos con el maquillaje, que trabajamos de noche...).
En definitiva, mostrar seguridad asegura muchas veces la consecución del empleo (aunque por dentro no sea así exactamente).